Muy común en estos tiempos, otro fabricante más que apuesta por el coche eléctrico, aunque lo más curioso de esta noticia, que recientemente saltaba a las páginas de medios especializados, es que Ford, Henry Ford, colaboró con Thomás Edison en los albores del Siglo XX en el desarrollo de un coche eléctrico, pero la historia no acabó demasiado bien. Por otra parte Edison, ferviente defensor de la corriente continua en los tiempos en que se iniciaba la expansión de este recurso energético, se enzarzó con su competencia George Westinghouse que era el abanderado de la corriente alterna, desarrollada por el legendario inventor croata Nikola Tesla.
Ford lanza el Equipo Edison encargado del desarrollo de nuevos coches eléctricos
La guerra entre estos dos genios, Edison y Tesla, acabó de forma bastante desequilibrada pues aunque el invento de éste, la corriente alterna, fue la fórmula adoptada a nivel mundial para la mayoría de las aplicaciones eléctricas (se le podría dar por ganador en la disputa) fue sin embargo Edison el genio que acabó siendo reconocido, recordado y capaz de disfrutar de sus logros de forma acomodada (a pesar de haber perdido) mientras que el croata correría una suerte muy distinta.
Ahora, más de cien años después, Ford ha creado un equipo denominado Team Edison que ha recibido el mandato de desarrollar nuevos coches eléctricos que les permitan competir con los que ofrece la marca Tesla y por extensión el resto de los fabricantes. La elección del nombre nos recuerda la antigua batalla y nos da pie a pensar que tal vez no sea muy acertado, dado el resultado que tuvo el enfrentamiento (a pesar del duro y despiadado comportamiento, las burlas y comentarios de Edison hacia su contrincante, ahí está la historia para corroborarlo).
Ford trabajó para Edison, en la Detroit Edison Illuminating Company, en los tiempos en que empezó a conducir su Cuadriciclo por las calles de Detroit allá por 1896, más tarde llegarían a ser buenos amigos, compartiendo viajes, regalos e incluso viviendo en casas vecinas. Todo lo anterior es historia, pero lo que tal vez sea menos conocido es que trabajaron juntos en el desarrollo de un coche eléctrico de bajo precio un proyecto que finalmente quedó en el olvido sin que a día de hoy se conozcan las causas verdaderas.
El proyecto de coche eléctrico existió
Si como prueba aceptamos las fotos de dos prototipos que se fabricaron en los años 1913 y 1914, por no mencionar las noticias de la época en medios tan prestigiosos como el New York Times. Pero un velo de misterio cubre el fracaso del proyecto, allá por el año 1915. Varias teorías acuden a explicar el hecho, una de ellas con un claro acento «conspiranóico» afirma que tras presiones de la industria petrolera, sobre Ford y Edison, estos decidieron abandonar el desarrollo del coche eléctrico, incluso llegan a citar como prueba el incendio de las instalaciones que Edison tenía dedicadas al desarrollo de las batería acumuladoras.
La realidad parece ser más prosáica, el uso de las baterías de ferroniquel desarrolladas por Edison eran incapaces de aportar el flujo de energía necesaria para impulsar el vehículo, como alternativa se probó a usar otras baterías de ácido (que habrían hecho el coche mucho más pesado), pero esto se hizo fuera de las directrices dadas por el mismo Henry Ford, cuando este tuvo conocimiento del hecho entró en cólera. Y ahí acabó todo, según informaciones de la misma Ford la inversión que se realizó en el desarrollo de este modelo superó los 1.5 millones de dólares y llegaron a comprar 100.000 baterías a la empresa de Edison antes de que el proyecto cayera en el olvido.
Aseguramos coches clásicos, si los hubiera eléctricos también los protegeríamos, el futuro dirá…