Estamos habituados a disponer de cientos de aplicaciones en el móvil para resolver problemas cotidianos, de los que desconocíamos su existencia hasta que apareció la App que nos resolvía el asunto. Pero ahora nos encontramos con la solución a una necesidad que realmente existe, la de conducir el coche de nuestros sueños. La aplicación no está aún por nuestras tierras, ha nacido una vez más allende los mares, en los EEUU. Cosa lógica dado el enorme parque automovilístico que se mueve en ese país.
Conducir un Ferrari o un Camaro es ahora más asequible
La idea existe, el alquiler de coches entre particulares está entre nosotros desde hace tiempo. En España y en otros países varias aplicaciones ofrecen este tipo de servicios para coches particulares, autocaravanas y muchos otros tipos de bienes (de ahí usar el ejemplo de Airbnb) pero hasta ahora nadie había ofertado el alquiler de coches clásicos. Ha sido una aseguradora americana especializada en motor clásico, se llama Hagerty, la que ha adquirido un servicio que se creó en 2014 con el nombre de «Classics&Exotics» y que ahora, tras su compra, han denominado «DriveShare» (Drive es conducir y Share compartir).
La cartera de coches actual asciende a 140 unidades repartidas por todos los Estado Unidos, teniendo en cuenta que Driveshare solo lleva en marcha un mes es todo un logro. Pocos son los argumentos que nos tienen que dar a los aficionados para encontrar justificación para hacer uso de esta oferta y darnos el gusto de conducir alguna de esas preciosidades, aunque muchas posibilidades más, cumpleaños, bodas o la asistencia a eventos, son las que se nos ocurren a bote pronto.
Un nuevo servicio, un gran precio
Un detalle es crítico en toda esta idea, el dinero, el precio a pagar no es bajo. Partiendo de la fianza a aportar que asciende a 500$, hay que sumar la cuota por día que, según los modelos, va desde unos pocos cientos de dólares hasta los mil. El precio también varía si lo alquilamos para conducir o sólo para hacer un reportaje fotográfico. Lógicamente el vehículo alquilado cuenta con una cobertura de seguro importante, con un servicio de asistencia en carretera del máximo nivel disponible.
Pero si por un momento nos olvidamos del maldito pecunio y echamos un ojo a la web podremos encontrar verdaderas maravillas, un Ford A de 1931, un Ferrari Daytona Spider del 71, un Camaro de 1969 o un Porsche Carrera 911 del 87, por nombrar algunos.
DriveShare nos ofrece la posibilidad de encontrarnos detrás del volante de coches que de otra forma serían inalcanzables para nosotros. La herramienta es útil, no sólo para conectar aficionados con propietarios de coches clásicos, sino también para expandir la comunidad de amantes del motor clásico. Esperemos que llegue pronto a nuestro país, aunque si no lo hace aquí regalamos gratis la idea para que cualquier emprendedor la use.
Consulta nuestros seguros para coche clásico.