Es difícil saber lo que alienta el corazón de una persona, qué es lo que lo hace latir de verdad, que se sienta intensa y profundamente vivo. Pero a veces podemos adivinarlo cuando miramos a su alrededor, y una vez que nos damos cuenta podemos, al menos en el caso que hoy vamos a relatar, lamentar que sus descendientes, o al menos sus herederos no compartan la misma pasión. Un nuevo relato sobre amor, inversión y dinero en nuestro blog.
Colección Lonati
Es un nombre poco conocido en nuestro país para el público en general, pero imaginamos que para los profesionales relacionados con la industria textil será de otra forma. Hablamos de Don TIberio Lonati, 1944-2013 originario de Brescia, Lombardía, en el norte de Italia. Se trata de un renombrado empresario dedicado a la fabricación de maquinaria textil (Grupo Lonati en industrias Santoni) que consiguió hacer de su empresa una de la principales multinacionales del sector. Hasta ahora nada que ver con nosotros, forofos como somos del mundo del motor clásico. La perspectiva varía cuando tenemos conocimiento de la próxima subasta de su magnífica colección, 60 motocicletas clásicas americanas, casi la mitad de ellas Harley-Davidson, siendo el resto marcas como Indian, Henderson o Flying Merkel.
La cosa se pone interesante cuando echamos un vistazo a los vehículos que van a ser subastados, el próximo 17 de Octubre, por la casa de subastas Bonhams, de la cual ya hemos hablado alguna vez por estas páginas, en el evento que organizan para el próximo fin de semana en la ciudad inglesa de Stafford. Entre ellos una Indian Modelo 402 de 1930 considerada la Duesenberg de las motocicletas, es decir, el más lujoso vehículo de la época en su tipo.
Su increíble historia
El Sr. Lonati empezó la colección al insistirle su hijo, un apasionado de las Harley-Davidson, para que comprara una Harley 1942 WLA civil, que era la moto del ejército americano durante los años de la Segunda Gran Guerra, vehículo que terminó siendo su preferido de todos los que llegó a poseer, y fue la responsable de alentar un interés tal que lo llevó a juntar este magnífico grupo de motocicletas americanas, dificil detallar las maravillas que abarca en este breve post, como ejemplo podemos citar una Pierce Four de 688 cc de 1910 que saldrá a la venta casi por 90.000€.
Hablábamos al principio de pasión, ese algo que mueve de forma muy particular a cada uno de nosotros (aunque se trate de ver televisión o criar geranios) y es personal e intransferible. Como en esta historia, donde tememos que tras el fallecimiento de D. Tiberio nadie entre sus herederos parece haber sabido (tal vez haya razones que el corazón no entiende) valorar la colección como un conjunto de piezas que están mejor juntas que dispersas, es triste que se desmembre una colección tan magnífica.
No es nuestra intención dar publicidad a ningún tipo de subasta o evento parecido, (aunque, tal vez, para alguno de nuestros lectores suponga un aviso interesante y puje por alguno de los magníficos lotes presentes en la susodicha subasta, aquí un enlace a la web que la casa Bonhams dedica a este catálogo).
Es notoria, sin embargo, la vistosidad de las máquinas ofertadas y muy interesante el descubrir, al menos el intuir, la gran cantidad de tesoros ocultos, y que aún no conocemos, apareciendo como setas en otoño en cuanto alguna circunstancia cambia en el apacible devenir de su existencia, haciendo que nuestra vida sea un poco más interesante, aún. Es como si un chiquillo tuviera la posibilidad de entrar en su tienda favorita de juguetes, por sorpresa, y pudiera tomar prestado cualquiera de ellos sin dar nada a cambio. El símil tal vez no sea exacto pero sí muy parecido, para nosotros, aficionados que disfrutamos con todo este diverso mundo del motor clásico.