¿Sabías que el primer descapotable moderno con techo retráctil fue un Peugeot? Aunque el coche sin techo más antiguo conocido es el Benz Victoria (1893), este modelo alemán no contaba con un sistema de capota como tal, ya que simplemente era un vehículo sin techo, similar a un carruaje. El título de primer descapotable con techo rígido retráctil pertenece al Peugeot 401 Eclipse, una auténtica joya entre los coches clásicos.
Lanzado en 1934, el Peugeot 401 Eclipse fue un coche revolucionario para su época. Equipado con un techo rígido que podía plegarse automáticamente y guardarse en el maletero, fue el primero en ofrecer esta innovadora solución, muy común hoy en día en los cabrios modernos. La idea fue concebida por el diseñador Georges Paulin, y Peugeot la hizo realidad en colaboración con el carrocero Pourtout.
Características del Peugeot 401 Eclipse
El 401 Eclipse estaba impulsado por un motor de 1.7 litros con 44 CV, y alcanzaba una velocidad máxima cercana a los 100 km/h, algo notable para mediados de los años 30. Lo que realmente lo hacía destacar era su sistema de techo retráctil eléctrico y rígido, una proeza tecnológica que anticipó en más de medio siglo a muchos convertibles contemporáneos.
Este coche clásico no solo ofrecía un diseño elegante y una conducción cómoda, sino que también permitía al conductor elegir entre una carrocería cerrada o abierta con solo pulsar un botón, algo absolutamente pionero en su época. Su producción fue limitada, lo que lo convierte hoy en una auténtica pieza de coleccionista.
Un antes y un después en los descapotables
El Peugeot 401 Eclipse no solo marcó un antes y un después en la historia de los descapotables, sino que también es considerado uno de los grandes hitos de la innovación automovilística del siglo XX. A diferencia del Benz Victoria, que no tenía capota retráctil, el Eclipse sentó las bases de lo que hoy conocemos como “convertible” o “descapotable” moderno.
En el mundo de los coches clásicos, este modelo representa una combinación perfecta de diseño, innovación y elegancia atemporal. A día de hoy, sigue siendo recordado como el primer verdadero descapotable moderno de la historia.
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